Hola Mar! No tindràs més remei que superar la teva tecnofòbia...perquè els joves d'avui dia no saben viure sense elles, i si vols que no et prenguin com una vella que no sap res del món...és el que et toca! Però jo penso que més que tecnofòbica el que estàs fent és allunyar-te de l'addicció...ajajajaj. Un petonet guapa, ens veiem demà a la diada!
Ei estupenda! He cridat a la resposta del teu mailing i et proposo una cosa: tu em visites i jo et visito. Fa 2 dies que tinc domini propi i tot i fa poc que tinc un sistema de localització per satèl·lit de les meves històries.
Mar! que guai aquest video! m'ha encantat!! a una assignatura d'educació social tenim la ciutat dels nens del Tonucci com un dels llibres a llegir. I a més m'han agradat molt els dibuixos, no sabia que eren del Frato. Si en tens més, posa'ls!! o envia-me'ls plis!! ;)
Mirant el video m'he recordat d'un conte molt guai, que ens va passar la de Didàctica. És aquest, és de Helen Buckley (està en castellà):
“Una vez el pequeño niño fue a la escuela. Era muy pequeñito y la escuela muy grande. Pero cuando el pequeño niño descubrió que podía ir a su clase con sólo entrar por la puerta del frente, se sintió feliz. Una mañana, estando el pequeño niño en la escuela, su maestra dijo: Hoy vamos a hacer un dibujo. Qué bueno- pensó el niño, a él le gustaba mucho dibujar, él podía hacer muchas cosas: leones y tigres, gallinas y vacas, trenes y botes. Sacó su caja de colores y comenzó a dibujar. Pero la maestra dijo: - Esperen, no es hora de empezar, y ella esperó a que todos estuvieran preparados. Ahora, dijo la maestra, vamos a dibujar flores. ¡Qué bueno! - pensó el niño, - me gusta mucho dibujar flores, y empezó a dibujar preciosas flores con sus colores. Pero la maestra dijo: - Esperen, yo les enseñaré cómo, y dibujó una flor roja con un tallo verde. El pequeño miró la flor de la maestra y después miró la suya, a él le gustaba más su flor que la de la maestra, pero no dijo nada y comenzó a dibujar una flor roja con un tallo verde igual a la de su maestra. Otro día cuando el pequeño niño entraba a su clase, la maestra dijo: Hoy vamos a hacer algo con barro. ¡Qué bueno! pensó el niño, me gusta mucho el barro. Él podía hacer muchas cosas con el barro: serpientes y elefantes, ratones y muñecos, camiones y carros y comenzó a estirar su bola de barro. Pero la maestra dijo: - Esperen, no es hora de comenzar y luego esperó a que todos estuvieran preparados. Ahora, dijo la maestra, vamos a dibujar un plato. ¡Qué bueno! pensó el niño. A mí me gusta mucho hacer platos y comenzó a construir platos de distintas formas y tamaños. Pero la maestra dijo: -Esperen, yo les enseñaré cómo y ella les enseñó a todos cómo hacer un profundo plato. -Aquí tienen, dijo la maestra, ahora pueden comenzar. El pequeño niño miró el plato de la maestra y después miró el suyo. A él le gustaba más su plato, pero no dijo nada y comenzó a hacer uno igual al de su maestra. Y muy pronto el pequeño niño aprendió a esperar y mirar, a hacer cosas iguales a las de su maestra y dejó de hacer cosas que surgían de sus propias ideas. Ocurrió que un día, su familia, se mudó a otra casa y el pequeño comenzó a ir a otra escuela. En su primer día de clase, la maestra dijo: Hoy vamos a hacer un dibujo. Qué bueno pensó el pequeño niño y esperó que la maestra le dijera qué hacer. Pero la maestra no dijo nada, sólo caminaba dentro del salón. Cuando llegó hasta el pequeño niño ella dijo: ¿No quieres empezar tu dibujo? Sí, dijo el pequeño ¿qué vamos a hacer? No sé hasta que tú no lo hagas, dijo la maestra. ¿Y cómo lo hago? - preguntó. Como tú quieras contestó. ¿Y de cualquier color? De cualquier color dijo la maestra. Si todos hacemos el mismo dibujo y usamos los mismos colores, ¿cómo voy a saber cuál es cuál y quién lo hizo? Yo no sé, dijo el pequeño niño, y comenzó a dibujar una flor roja con el tallo verde.” Helen Buckley
Segueix posant coses, que són super interessants!!!
Ei preciosa!! Que xulo el vídeo! A mi m'agraden molt les binyetes d'aquest home, trobo que té ocurrències boníssimes i que amb quatre esbossos és capaç de dir moltes coses. No havia vist cap vídeo, pero algun dels dibuixos que hi surten ja els havia vist. Tu en tens un llibre a casa, oi? El vaig veure un dia!
Per cert Cris, em sembla que el conte que has escrit ja ens l'havies explicat alguna vegada. Sinó tu, algú altre ho havia fet. És veritat que lliga molt amb el Tonucci!
Bueno, continuo investigant pel blog, que sembla interessant! Muas des de les àfriques, Doa
6 comentaris:
Hola Mar! No tindràs més remei que superar la teva tecnofòbia...perquè els joves d'avui dia no saben viure sense elles, i si vols que no et prenguin com una vella que no sap res del món...és el que et toca! Però jo penso que més que tecnofòbica el que estàs fent és allunyar-te de l'addicció...ajajajaj.
Un petonet guapa, ens veiem demà a la diada!
Jara
Ja tens raó Jara, i tant! En tot!!
ens veiem demà guapa!
merci per visitar-me! ;)
Ei estupenda! He cridat a la resposta del teu mailing i et proposo una cosa: tu em visites i jo et visito. Fa 2 dies que tinc domini propi i tot i fa poc que tinc un sistema de localització per satèl·lit de les meves històries.
Dani (el graller-arreplegat-bastoner)
www.altresbarcelones.com
Mar! que guai aquest video! m'ha encantat!! a una assignatura d'educació social tenim la ciutat dels nens del Tonucci com un dels llibres a llegir. I a més m'han agradat molt els dibuixos, no sabia que eren del Frato. Si en tens més, posa'ls!! o envia-me'ls plis!! ;)
Mirant el video m'he recordat d'un conte molt guai, que ens va passar la de Didàctica. És aquest, és de Helen Buckley (està en castellà):
“Una vez el pequeño niño fue a la escuela. Era muy pequeñito y la escuela muy grande. Pero cuando el pequeño niño descubrió que podía ir a su clase con sólo entrar por la puerta del frente, se sintió feliz.
Una mañana, estando el pequeño niño en la escuela, su maestra dijo:
Hoy vamos a hacer un dibujo.
Qué bueno- pensó el niño, a él le gustaba mucho dibujar, él podía hacer muchas cosas: leones y tigres, gallinas y vacas, trenes y botes. Sacó su caja de colores y comenzó a dibujar.
Pero la maestra dijo: - Esperen, no es hora de empezar, y ella esperó a que todos estuvieran preparados.
Ahora, dijo la maestra, vamos a dibujar flores.
¡Qué bueno! - pensó el niño, - me gusta mucho dibujar flores, y empezó a dibujar preciosas flores con sus colores.
Pero la maestra dijo: - Esperen, yo les enseñaré cómo, y dibujó una flor roja con un tallo verde. El pequeño miró la flor de la maestra y después miró la suya, a él le gustaba más su flor que la de la maestra, pero no dijo nada y comenzó a dibujar una flor roja con un tallo verde igual a la de su maestra.
Otro día cuando el pequeño niño entraba a su clase, la maestra dijo:
Hoy vamos a hacer algo con barro.
¡Qué bueno! pensó el niño, me gusta mucho el barro. Él podía hacer muchas cosas con el barro: serpientes y elefantes, ratones y muñecos, camiones y carros y comenzó a estirar su bola de barro.
Pero la maestra dijo: - Esperen, no es hora de comenzar y luego esperó a que todos estuvieran preparados.
Ahora, dijo la maestra, vamos a dibujar un plato.
¡Qué bueno! pensó el niño. A mí me gusta mucho hacer platos y comenzó a construir platos de distintas formas y tamaños.
Pero la maestra dijo: -Esperen, yo les enseñaré cómo y ella les enseñó a todos cómo hacer un profundo plato. -Aquí tienen, dijo la maestra, ahora pueden comenzar. El pequeño niño miró el plato de la maestra y después miró el suyo. A él le gustaba más su plato, pero no dijo nada y comenzó a hacer uno igual al de su maestra.
Y muy pronto el pequeño niño aprendió a esperar y mirar, a hacer cosas iguales a las de su maestra y dejó de hacer cosas que surgían de sus propias ideas.
Ocurrió que un día, su familia, se mudó a otra casa y el pequeño comenzó a ir a otra escuela. En su primer día de clase, la maestra dijo:
Hoy vamos a hacer un dibujo.
Qué bueno pensó el pequeño niño y esperó que la maestra le dijera qué hacer.
Pero la maestra no dijo nada, sólo caminaba dentro del salón. Cuando llegó hasta el pequeño niño ella dijo:
¿No quieres empezar tu dibujo?
Sí, dijo el pequeño ¿qué vamos a hacer?
No sé hasta que tú no lo hagas, dijo la maestra.
¿Y cómo lo hago? - preguntó.
Como tú quieras contestó.
¿Y de cualquier color?
De cualquier color dijo la maestra. Si todos hacemos el mismo dibujo y usamos los mismos colores, ¿cómo voy a saber cuál es cuál y quién lo hizo?
Yo no sé, dijo el pequeño niño, y comenzó a dibujar una flor roja con el tallo verde.”
Helen Buckley
Segueix posant coses, que són super interessants!!!
Fins dimarts ;)
Cris
Ei preciosa!! Que xulo el vídeo! A mi m'agraden molt les binyetes d'aquest home, trobo que té ocurrències boníssimes i que amb quatre esbossos és capaç de dir moltes coses.
No havia vist cap vídeo, pero algun dels dibuixos que hi surten ja els havia vist. Tu en tens un llibre a casa, oi? El vaig veure un dia!
Per cert Cris, em sembla que el conte que has escrit ja ens l'havies explicat alguna vegada. Sinó tu, algú altre ho havia fet. És veritat que lliga molt amb el Tonucci!
Bueno, continuo investigant pel blog, que sembla interessant!
Muas des de les àfriques,
Doa
parlant del Tonucci, a la Contra de la Vanguardia del dia 11/9/07 li fan una entrevista!
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